Planificar no es una disciplina fácil, pero es muy necesaria cuando se dispone de un recurso escaso. Seguramente esos días llenos de actividades ha debido planificarlos en su agenda, para así lograr cumplir con todos sus compromisos. Con el dinero debe hacer lo mismo. Planificarse financieramente le permitirá enfrentar sus gastos, ahorrar para acceder a nuevos bienes o servicios, e incluso invertir.
Un plan financiero le ayudará a alcanzar sus metas. Es una herramienta poderosa y flexible, que puede imaginar como un trazado en un mapa. Ayuda a saber dónde estamos y a dónde queremos ir. Demás está decir que si no sabemos a dónde ir, lo más probable es que terminemos en un lugar al que no deseábamos llegar, como el sobreendeudamiento.
Para desarrollar un plan financiero es necesario conseguir información, tomar decisiones, actuar, evaluar y plantearse metas de corto, mediano y largo plazo.
Los planes financieros funcionan bien, en la medida en que son simples y se estiman en forma realista respecto de los ingresos y todos los gastos mensuales. Además, deben ser revisados y ajustados periódicamente para reflejar los cambios en las condiciones de mercado y los objetivos. Compartirlos con el grupo familiar, para llevarlo a cabo junto con ellos, favorece la unión de la familia y contribuye al éxito de las metas propuestas.
1° Revise sus gastos mensuales
No es fácil saber en qué gastamos nuestro dinero. Para optimizar su uso o disminuir los gastos, debemos conocer exactamente cuál es nuestro ingreso y en qué lo gastamos.
El mejor camino es elaborar un presupuesto detallado que considere todos sus ingresos y gastos mensuales:
- Los primeros son sus gastos fijos mensuales, como los servicios de su hogar (agua, luz, teléfono, gas, etc.), lo que gasta en el supermercado, la farmacia o la feria.
- Incluya el sueldo que le paga a la persona que asea su casa o cuida a sus hijos, el costo de quien cuida su jardin si vive en casa y los gastos comunes si vive en un condominio o un edificio.
- Los gastos de transporte y/o bencina.
- Los gastos en matrículas y cuotas mensuales de colegios y/o universidades. Incluya los gastos en materiales y la mesada de sus hijos si los tiene.
- No olvide las cuotas de sus deudas.
- Por último, recuerde considerar todos los gastos no programados, conocidos como "Gastos hormiga" que normalmente no se consideran importantes, pero que muchas veces pueden provocar desajustes serios en el presupuesto mensual. Es el caso de los regalos, los cigarrillos, helados, bebidas, comida chatarra, entradas al cine, teatro o recitales, revistas, CD's o DVD's y compras impulsivas de ropa o accesorios para el hogar.
Para que no olvide nada, hemos preparado el interactivo Calculadora de "Presupuesto mensual", calc que agrupa todos los gastos que debe considerar y lo ayudará a analizar qué porcentaje de sus ingresos mensuales destina a cada uno de ellos.
Al registrar todos sus gastos podrá tomar medidas para disminuirlos. Y también podría llegar a concluir que hay gastos que consideraba como no programados, pero que en realidad se han convertido en gastos fijos que debe considerar a la hora de planificarse, por ejemplo, ropa, medicamentos, almuerzos o cenas en restaurantes, entradas a recitales y salidas nocturnas a bares o pubs.
2° Determine cuál es su objetivo
Para formular un plan financiero respóndase la siguiente pregunta "¿para qué quiero ahorrar?". Evalúe cuáles son las metas más importantes para usted: comprar un auto, viajar, educarse, estar preparado para una emergencia, disponer de capital para su vejez, adquirir una propiedad, desarrollar un negocio propio, etc.
Debe tener presente que con muy escasos recursos algunas familias acceden a la compra de su casa, ahorran para educar a sus hijos o para vivir dignamente su vejez. Si ellos lo pueden hacer, ¡usted también!.
Y para ayudarlo a planificar su ahorro, lo invitamos a utilizar nuestra calculadora "Prepare su plan de ahorro".
3° Respetar el plan fijado
Tras definir su plan financiero, recuerde tomar un decisión informada antes de gastar en un bien o servicio, considerando la meta de ahorro que se ha propuesto, y cuán necesario es lo que va a adquirir.
Si opta por invertir, para conseguir el monto que se ha propuesto antes, escoja él o los instrumentos más adecuados, es decir, aquellos que se ajusten mejor a lo que espera: plazo, liquidez, nivel de riesgo y demás características de los instrumentos. En los artículos Perfil del Inversionista y La ruta de los negocios en el Mercado de Valores encontrará más información al respecto.